jueves, 5 de mayo de 2011

Jaén, en Sevilla











No es habitual que una provincia tan ganadera como Jaén vea como alguna de sus muchas vacadas se anuncia en las grandes ferias. Araúz de Robles y Sorando mantuvieron cierta asiduidad en San Isidro, y que yo sepa, también Araúz ha sido la única jiennense en estar presente en Pamplona. (Conste que excluyo adrede a Samuel, que hace años no tiene toros ni vacas en "Los Alarcones").


Por eso mismo mañana es un gran día para el Jaén ganadero. En Sevilla se presenta con corrida de toros "Torrehandilla", divisa asentada en las tierras rojas de "La Marquesa", prácticamente extramuros de Vilches, patria de extraordinarios picadores.


Nueve toros fueron embarcados ayer, a punto día, en esa finca, y los nueve han sido aprobados. Algunos de ellos no son los que primitivamente fueron reseñados por los veedores de la empresa, ya que en la visita al campo del equipo gubernativo hubo que cambiar toros y meter otros no tan bien hechos. Es una pena, pero atrás se han quedado animales de hechuras fantásticas, como un jabonero, "Emisario-11", al que habrá que seguirle la pista.


Pero, de todas formas, ahora mismo pasan sus últimas horas en Sevilla ejemplares de perfecta morfología, de los que particularmente destacaría tres. Un taco es "Repudiado-18" de esos que fichas nada más entrar al cercado. Más tocadito de pitones, muy en "Jandilla", es el nº 50, "Espontáneo", mientras bonito como él solo hay otro negro, "Chismoso-28", que además es hijo de un semental de Borja Domecq que ligó de forma extraordinaria, y que se llamó "Patán-111", cuya cabeza disecada adorna ahora el comedor anexo a la plaza de tientas de "La Marquesa".


En fin, que por muchos motivos, me gustaría que la corrida embistiera. En su contra, dos hándicaps, llamados "El Cid" y "Cayetano", que no lo ven por ningún sitio, y como pro, precisamente que a Manuel Jesús Cid todos los días le embiste, por lo menos, un toro... si no los dos.


La suerte está echada, pero como jiennense de corazón, desearía que alguno de estos "Torrehandillas-Torreherberos" tuvieran el comportamiento de muchas eralas y toros que yo he visto tentar en la intimidad de los tentaderos. Pero la plaza es otra cosa y, La Maestranza, más todavía.

La respuesta, en unas horas. Que haya suerte.

1 comentario:

Emilio Lentisco dijo...

No ha estado mal el debut de la ganadería. Sin creerselo, pero los Morales pueden estar contentos.
Mis felicitaciones