Es que al ganadero de toros se le ha privado por completo de libertad, y si quiere vender sus camadas, tiene que ser a fuerza de tolerancia con empresarios, toreros, apoderados, etc. Hoy, el que menos manda en una ganadería es el dueño de ella.
Antonio Pérez de San Fernando, ganadero. Enero de 1960.
Por desgracia, más de medio siglo después, no hay nada nuevo bajo el sol. Y así nos va.
3 comentarios:
52 añitos,luismi...son 52 años
y eso que el señor de san fernando lo vendía todo,precisamente porque a todo se plegaba...
nacho
La verdad es que todo no sigue igual algunas han cambiado para mal, especialmente aquella parte de romanticismo o generosidad que existía entre algunos ganaderos par con los "aspirantes a figuras" que les permitían hacer tapia y enumerarse para que todos tuvieran su oportunidad en el tentadero, o aquellos apoderados que estaban pendientes para "sacar" nuevos toreros, y que "poquitos" pagaban por torear hoy está esto solo p´a los ricos ya que apoderados "románticos" no que dan, un Ejemplo el de Rafael Sanchez "El Pipo" con El Cordobes, José Fuentes, Curro Vazquez, Antonio Porras. ¡Hoy todo hecho desde Enero y para entrar en una feria hay que encomendarse a San Pedro.
la culpa la tienen ellos y nada mas que ellos.lo que tienen que tener los mismos cojones que sus toros.a lo mejor no los tienen ni ellos ni sus toros.
el cortinar
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