Algunas veces, pocas la verdad, sobre todo en el plan ganadero, los triunfos se respetan y las empresas cumplen aquella máxima, (que debería ser ley) según la cual hay que repetir al que logra un éxito. El de la ganadería jiennense "Miranda y Moreno" en Cuenca el año pasado fue de órdago. Hasta el punto que, habiéndose indultado un toro de José Vázquez, el premio del Colegio de Veterinarios fue para "Mermón", un colorado de perfectas hechuras seleccionado por Javier Moreno y Rafael Miranda, al que Sebastián Castella cortó las dos orejas.
Aquel día salieron a hombros los tres matadores, y Angel Moreno Pérez-Tabernero, hijo mayor del propietario de la divisa. Y ahora, un año después, ocho toros de esta casa criados en "El Collado de Santa Ana", en el término jiennense de Guarromán, casi a tiro de piedra de la A-4 esperan su destino en los corrales de la plaza de Cuenca.
Entre ellos hay algunos que deben ser bravos de verdad, como el segundo, "Chafarrotillo-52", y otros, como "Platero-45", que cantan nobleza en su expresión. Eso sí, el que debía ser un súperclase por todo, "Esturreado-33" se ha quedado como segundo sobrero. Cosas de los "profesionales", que tampoco tienen por qué saber que es hijo de una vaca cuya familia da una calidad excelsa, y de "Mandarino-84", un raceador que por trapío podía haber ido a Bilbao y además es el más importante en la historia ganadera de esta divisa.
Pero, guiños del destino, el padre de gran parte del encierro es "Carruaje-55", un semental que da mucha raza y cuya selección para cubrir tiene mucho que ver con la plaza de Cuenca, donde el 22 de agosto de 2005 se lidió "Carroza", que dio un juego sensacional. Tanto, que hizo al ganadero indagar en su reata. Y en el campo estaba su sobrino, "Carruaje", que fue tentado cuando aún no había cumplido de eral. Yo lo vi tentar, y de los muchos tentaderos de machos que he visto, nunca presencié a un novillo tan bravo como éste. Se arrancó a matarse una y otra vez contra el caballo, y después estuvo media hora embistiendo por abajo en la muleta, con una entrega y duración impresionantes.
Hoy varios de sus hijos se lidian en Cuenca, cerrando un bonito círculo del destino que comenzó hace ahora siete años. Seguro que ayudan a que su divisa suba un peldaño más, el que con toda seguridad afirmo que la llevará a estar muy pronto en las ferias y con las figuras de verdad. No hay otro camino posible que el éxito para las cosas buenas de verdad.